martes, 25 de noviembre de 2014

Reconfigurar el mapa político junto a las fuerzas más consecuentes.

Jujuy - Plenario de LAUTARO-Organización para la Liberación Argentina.

Sosteniendo un programa que busca la organización y el protagonismo de los mejores hombres y mujeres de nuestra patria, los campesinos y productores pobres, los trabajadores de las ciudades, los jóvenes que asumen con audacia su lugar en la historia, los profesionales y estudiantes comprometidos con su pueblo, las comunidades que afirman su cultura y la defienden.

Para ello buscamos conmocionar la realidad nacional reconfigurando el mapa político junto a las fuerzas más consecuentes, expresión sintetizada en la provincia de Jujuy desde el frente del Partido por la Dignidad del Pueblo, impulsando desde las fuerzas del pueblo organizado un cambio de fondo mediante la convocatoria a un proceso constituyente revolucionario bajo una constante movilización popular y ciudadana.


Por la importancia que adquiere la posibilidad de este rumbo para el futuro del país y en la perspectiva estratégica de las fuerzas de los trabajadores y el pueblo en particular, es que desde las definiciones adoptadas en el Plenario Provincial de la Organización Lautaro de Argentina proponemos los ejes más importantes en los que debiera girar un proceso constituyente, popular y revolucionario:

Nacionalización de los Recursos Naturales:

Gas, petróleo, y minería principalmente. Recurriendo a un programa de explotación responsable y ambientalmente sustentable de los mismos bajo control de los trabajadores y las organizaciones del pueblo.


Soberanía alimentaria:

Declaración de la producción, distribución y comercialización de los alimentos como Recurso Estratégico y de Interés Nacional, nacionalizando el comercio exterior de productos primarios (agricultura, ganadería y pesca), bajo condiciones de garantía de sostenimiento de precios y rentabilidad razonable al sector privado, fijadas a consideración de la ciudadanía con plebiscitos vinculantes.

 
Reforma Política y profundización democrática:

Ampliación de la cantidad de representantes parlamentarios, facilidades y garantías para la libre asociación y creación de nuevos partidos y coaliciones, reemplazo del sistema d´hont por el porcentual y revocatoria de mandatos ejecutivos a término medio.


Seguridad:

Elección popular de las autoridades policiales con coordinación y participación de las organizaciones en el control territorial.


Reparto de ganancias y libertad sindical:

Establecer mecanismos de participación obrera en la producción y ganancias, atadas a la productividad y la capacitación permanente. Garantizar el derecho a la libre asociación en todos los grados, abogando por la unidad de los trabajadores en una sola representación.


Economía Social:

Constitución de un sistema mixto Estatal-Cooperativo de empresas testigo en todas las ramas de la economía como herramienta de desarrollo, desmonopolización, e inclusión social masiva, sostenida por recursos genuinos y una perspectiva de largo plazo.


Restablecimiento de los derechos sociales y ancestrales:

Con especificidades para la niñez, la juventud, la mujer, la ancianidad y la familia. Plena soberanía sobre sus territorios a las comunidades indígenas, y vigencia de sus cosmovisiones como así también de su organización comunitaria como paso necesario hacia un nuevo modelo civilizatorio.


Narcotráfico y tráfico de personas:

Declararlos como crimen de lesa patria y lesa humanidad, abordándolos como elementos modernos de desintegración y corrupción social, nacional e institucional. Abogando por la articulación de todos los sectores políticos y sociales para combatir este flagelo.


Defensa Nacional:

Definición de una Estrategia de Defensa, integrada al desarrollo científico y productivo nacional, y restablecimiento del Servicio Militar Obligatorio en los marcos de un proyecto popular y revolucionario.


Posición Internacional Soberana e Integracionista:

Ratificando y profundizando la inserción internacional, promoviendo la integración Sur-Sur e independiente de las potencias con tendencias hegemonistas, promoviendo el protagonismo del país en el impulso del multilateralismo y la resolución pacífica y justa de los conflictos internacionales.


Desandar el neoliberalismo y sus terribles consecuencias solo es posible sobre la base de un proyecto de país diametralmente enfrentado al desarrollo y el progreso que promueve el capitalismo, un proyecto estratégico de largo plazo cuyas bases deben surgir de experiencias ancestrales, revitalizadas en la organización y lucha indígenas actuales, y hacia la invención del socialismo del siglo XXI que solo será posible con el protagonismo y la movilización de nuestros pueblos enfrentando al imperialismo y sus socios nativos.

miércoles, 19 de noviembre de 2014

Hacia una fuerza indigenista, patriótica y revolucionaria.

Plenario provincial de la OLA-Organización para la Liberación Argentina.

“Desde la OLA-Organización para la Liberación Argentina saludamos orgullosamente a cada hermano y hermana que con espíritu de sacrificio impulsa la construcción de nuestra fuerza, sosteniendo un programa que busca la organización y el protagonismo de los mejores hombres y mujeres de nuestra patria, los campesinos y productores pobres, los trabajadores de las ciudades, los jóvenes que asumen con audacia su lugar en la historia, los profesionales y estudiantes comprometidos con su pueblo, las comunidades que afirman su cultura y la defienden, es decir la inmensa mayoría de hermanos y hermanas que a toda prisa y desde abajo nos organizamos por la segunda y definitiva independencia”

Jujuy, sábado 22 de noviembre de 9 a 17 horas.

Sede central de la Corriente del Pueblo.
Virrey Toledo 178, barrio Santa Rita.
 

“El capitalismo, su organización de la vida, ha hecho del mundo un lugar inhabitable, al punto que todo las corrientes científicas, filosóficas y espirituales advierten sobre el pronto colapso que se avecina en el planeta; el consumismo, los vicios, la superchería colonizante en desplazamiento de la espiritualidad, buscan arrasar con nuestro tradicional y ancestral modo de vida, contraria a esa maquinaria destructiva que es occidente con sus planes de exterminio y saqueo sobre nuestros pueblos, implementado el genocidio cultural con voracidad, gobierno tras gobierno”


Cronograma:

9hs – Acreditaciones y entrega de materiales del plenario.

9.30hs – Presentación del encuentro a cargo de referentes provinciales y nacionales de la OLA.

10 A 12HS – Una organización que contacte con lo mejor de nuestro pueblo, trabajo y debate en comisiones.

12 a 13.30hs – Almuerzo y descanso, con proyecciones a cargo de “La Rabia” Radio/tv Escuela.

13.30hs a 15.30hs - Propuestas de actividades generadas desde las comisiones sobre los ejes temáticos hacia la convocatoria de un proceso constituyente revolucionario bajo una constante movilización popular y ciudadana.

15.30 a 17hs – Presentación de los equipos y tareas de campaña para la instalación en toda la provincia de la Fuerza Indigenista y Patriótica.

domingo, 16 de noviembre de 2014

Acciones de sabotaje en el sur indígena de la Argentina.






*Ali Rida Eric Peralta.

La lucha por el poder de los hombres y mujeres de la mapu, de la pacha, no debe alimentar el separatismo y las autonomías regionales, solo una gran nación pluricultural puede vencer sobre los poderes imperiales que pretenden nuestro exterminio.

La lucha se desarrolla hacia un nuevo estado, una estrategia de poder indigenista, patriótica y de unidad nacional, hacia una profunda revolución que sea luz y compromiso combatiente con otros pueblos del mundo.

Los paradigmas hacia un nuevo modelo civilizatorio están ancestralmente arraigados en nuestros territorios, en las experiencias y resistencias culturales que no hayan sido atravesadas por las lógicas destructivas de occidente contra la humanidad, su medio y todas las formas de vida.

El capitalismo, su organización de la vida, ha hecho del mundo un lugar inhabitable, al punto que todo las corrientes científicas, filosóficas y espirituales advierten sobre el pronto colapso que se avecina en el planeta, el consumismo, los vicios, la superchería colonizante en desplazamiento de la espiritualidad, busca arrasar con nuestro tradicional y ancestral modo de vida, contrario a esa maquinaria destructiva que es occidente y sus planes de exterminio y saqueo sobre nuestros pueblos, implementado el etnocidio con voracidad gobierno tras gobierno.

El sur de nuestro país ha tenido convulsiones por actos de sabotaje que se adjudicó recientemente la organización Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), acciones arraigadas en una lucha absolutamente necesaria que hay que dar en los territorios contra las trasnacionales y multinacionales, que los ocupan para saquear, pero claro, las tácticas adoptadas se enmarcan en una perspectiva estratégica que incurre en los mismos errores que tuviera la "gente de la tierra" durante las guerras de las independencia y el surgimiento de los estados nacionales.

En aquel tiempo sostuvieron la "Nación Mapuche" negándose durante años a ser parte de los estados de Chile y Argentina, afianzando en ese objetivo una fuerte alianza con la corona española, lo que, lejos de fortalecer los derechos ancestrales, permitió la utilización de fuerza indigenista por parte de la principal potencia invasora de la época, para golpear a los patriotas, que si bien entre ellos estaban los que daban una fuerte lucha por el protagonismo de las comunidades y líderes indígenas en las principales decisiones y orientaciones de lo que debía ser el naciente estado, lo cierto fue que se afianzo el genocidio cultural, toda vez que implicó un proceso de occidentalización masiva y forzosa de los pueblos indígenas.

Un ejemplo paradigmático es el de la reducción conceptual –por lo tanto material en los hechos- del indígena a la categoría de campesino, buscando uniformizar a los oprimidos en función de su potencial relación en la matriz general de desarrollo capitalista y socialista modernos. La comunidad indígena buscaba asimilarse entonces al de “colonia” de criollos que trabajaban la tierra, consistiendo su relación con ella, entre los miembros de su comunidad, y de esta comunidad con el resto de la sociedad, apenas una anécdota, cuando no un obstáculo a sortear mediante el aparato educativo y cultural del estado.

Esta composición histórica de “acriollamiento” de una parte de la población, que no es otra cosa que la consecuencia del proceso de occidentalización forzada, conformó paralelamente a las culturas oprimidas u olvidadas por siglos, un amplio movimiento popular de pobres, explotados y oprimidos de carácter híbrido, fruto del carácter torcido del desarrollo nacional latinoamericano, reforzado por las sucesivas oleadas inmigratorias europeas del siglo XIX y XX.

Esta sociedad criolla, es la protagonista indiscutible de las luchas políticas y sociales de la edad moderna, a cuyos márgenes siempre excluyó a nuestra mayoría nacional de hermanos indígenas, con el curioso y coincidente rótulo común de “atrasados” con el que las clases dominantes decidían exterminarlos.

En nuestro país, este proceso es particularmente trágico. La derrota cultural de los pueblos originarios fue acompañada de inhumanas e intensas campañas de aniquilamiento y desplazamiento masivos que hicieron prácticamente imposible su desarrollo sostenible aun en marcos de un relativo aislamiento. La estructura urbana y la matriz económica del país en sus sucesivas etapas, forzaron una tendencia a la inviabilidad de las comunidades indígenas. Las campañas forzosas de evangelización primero, y de “estatización” y “nacionalización” socioeducativa después, ofrecieron un canal de supervivencia, de fuga, al destino de exterminio.

Promovieron la emigración y el debilitamiento de las comunidades, combinando con su progresiva corrupción; al día de hoy las comunidades se ven obligadas a la aceptación de dádivas y condiciones humillantes, a cambio del reconocimiento formal de su existencia.
 


Ante los hechos de esa realidad vivida y asimilada con consecuencias trágicas para nuestras comunidades, es que deben explicarse las resistencias aún aisladas que se impulsan, reconociendo también nuestra incapacidad hasta aquí de construir en la Argentina un centro de gravedad que funcione como “organismo nacional”, garante de la supervivencia sobre la base de demandas permanentes relativamente  generales.

El aislamiento unas de otras, complica asimismo a las comunidades en la conformación de movimientos sociales indigenistas regionales de magnitud, y por fuera de las lógicas divisionistas que instalan los sectores de poder, para asegurar su hegemonía con recambios que les permiten generar enfrentamientos entre sectores que debiéramos encontrarnos en tránsito hacia una misma perspectiva estratégica.

Pueda esta vez entenderse que la balcanización de nuestros países, las propuestas separatistas, autonomistas, van en sintonía con los intereses de las élites; en una nación que debiera enfrentar a las mismas oligarquías nativas, a un mismo imperialismo, a una misma estrategia sionista para la región, de saqueo de los principales recursos naturales de nuestros pueblos y comunidades, de fuerzas de ocupación que plasman junto a los gobiernos nacional y provinciales planes de exterminio, desplazamientos forzados, asesinatos selectivos, negocios inmobiliarios, robo y ocupación de tierras para su explotación, liberación de territorios para las redes del narcotráfico, explotación infantil y redes de trata, con sicarios y mercenarios que son parte de los poderes judiciales, legislativos y ejecutivos.

Sin dudas corresponde resistir a como dé lugar pero en una estrategia de poder pluricultural que convierta al nuevo estado, al que debemos construir, en una cohesionada fuerza indigenista y patriótica, una revolución nacional comprometida con pueblos hermanos del mundo, que se sostenga desde tradiciones, cosmovisiones y cosmovivencias ancestrales, con valores que expresen la fortaleza de la montaña y se sostenga desde paradigmas que se erigen a contramano de la descomposición de occidente.

Organizarnos y resistir en cada pueblo y comunidad, dando pasos para en los años por venir gobernar en los territorios, avanzando hacia ganar el gobierno desde una Fuerza Indigenista Patriótica, desde la OLA estamos abocados a esa tarea.

*Docente del Instituto Taki Onqoy, Secretario General de la OLA - Organización para la Liberación Argentina.

miércoles, 12 de noviembre de 2014

Reina Maraz, su vida e injusta condena debe interpelarnos como sociedad.





Por Ali Rida Eric Peralta*

La libertad de Reina Maraz es liberarnos del crimen más cruel, el que se vive puertas adentro, el del ámbito doméstico, que la comunidad considera "de la vida privada" para no asumir compromisos y no verse obligada a interpelarse.

Luchar por la libertad de Reina, la joven quechua de nacionalidad boliviana, es liberar a las mujeres del maltrato y las vejaciones que en la Argentina se reproducen una y otra vez, cobrándose miles de muertes.

Durante un año padeció su detención sin que el estado y el poder judicial le informaran sobre su situación, sufriendo la misma indiferencia en la que tuvo que vivir las peores humillaciones durante años,  logrando solo comunicarse a través de la interpretación que realizaban las internas que la acompañaban.
Reina Maraz, en el juicio que la condenara a perpetua, pudo dar por primera vez testimonio en su lengua materna, el quechua, sin embargo, su relato para el tribunal paso sin más, no fue incorporada la voz de Reina, condenándola por unanimidad a prisión perpetua por la muerte  de Límber Santos, su marido, en el año 2010; en un episodio que involucra situaciones de extrema violencia, de las que Reina fue víctima.

Tomando exclusivamente como parte de su decisión lo que ha venido sosteniendo el fiscal, las juezas no reconocieron en Reina una mujer vulnerada en sus derechos, migrante, aborigen, pobre, analfabeta, y sometida a la violencia doméstica y sexual, que durante años significo golpizas, violaciones, maltrato psicológico y explotación sexual por parte de su marido como pago de deudas que este contraía.

Cuando la detuvieron en 2010, Reina estaba embarazada y pasó siete meses en una comisaría hasta que la trasladaron a la Unidad 33 de Los Hornos, en La Plata, donde nació su tercer hijo. Con el más grande, que tenía 5 años al momento de su detención, perdió toda comunicación porque estaba con los padres de Santos; solo pudiendo hablar por teléfono con el más chico algunas veces a la semana.

Ya en el 2011, la Comisión Provincial por la Memoria la encontró durante un monitoreo en lugares de encierro, descubriendo un año después de su encierro a Reina y el conflicto con el idioma.

En abril de 2012 el Juzgado de Garantías Nº 6 de Quilmes se vio obligado ante las desprolijidades que se le endilgaban a anular la audiencia en la que Reina había declarado y el tribunal ante una orden de la Corte de la Provincia aceptó que se tomara una nueva indagatoria con una traductora.

Fue a fines del 2013 que por primera vez alguien le explicó a Reina la situación procesal en quechua, recién allí pudo darle dimensión a la injusticia que la tenía encarcelada con su pequeño bebe desde hacía tres años, privándola de sus otros dos hijos.

La condena a Reina se define desde una  prueba en la que se apoya la acusación que es inválida, una de las pruebas testimoniales centrales de la fiscalía es la grabación de una cámara Gesell al hijo mayor de Reina, realizada por la fiscal que intervino en primera instancia en la investigación, donde se escucha la voz del pequeño que en ese momento tenía sólo 5 años.

En el testimonio –en el que intercala palabras en quechua- el niño dice que a su papá lo mataron “Tito”, y su mamá, Reina. Sin embargo, las tres expertas en psicología que vieron y escucharon el testimonio mientras se reproducía en la sala (llamadas a dar testimonio) cuestionaron la forma en que se le tomó declaración al niño.

Si bien cada una de las expertas hizo foco en diferentes aspectos del testimonio, tanto Olga Lucía Scrimi como Liliana Beatriz Camerano (perito psicóloga de la defensoría judicial de Quilmes) y María Inés Olivella coincidieron en que las preguntas eran inducidas y las respuestas “sobreentendidas” por el adulto; además, objetaron la posibilidad de determinar, a partir de ese solo testimonio, si lo que dice el niño es algo que vio o algo que le dijeron y que reproduce, inclinándose por esta última opción.

Tito es otra de las personas acusadas por el asesinato, quien murió hace un año en la cárcel, amigo de Santos y uno de los hombres que sometía sexualmente a Reina a cambio de las deudas que acumulaba su esposo, durante el juicio el vicecónsul de Bolivia relató un diálogo con Tito cuando estaba preso en el que el hombre se autoincriminaba.

En el relato del juicio se hicieron visibles las condiciones extremas en que vivía Reina, y los reiterados abusos de los que fue víctima, sin embargo el poder judicial jugo de memoria, represento su papel dejando pasar  la posibilidad de sentar un precedente histórico en la perspectiva de derechos humanos que contiene el caso.

Lejos de ser un caso excepcional, Reina Maraz, su vida e injusta condena son consecuencia de la compleja trama de violencias que sufren las mujeres y las nulas respuestas desplegadas desde el Estado.

Nos queda continuar la pelea por la hermana Reina, para que su libertad nos libere a todos y todas de una muy naturalizada manera de violencia en nuestra sociedad, una expresión más de la descomposición en que se manifiesta la vida.

*Docente del Instituto Taki Onqoy, Secretario General de la OLA-Organización para la Liberación Argentina.